En un trágico suceso que ha conmocionado a la comunidad judicial, Carlos Gaitán Bazurto, fiscal de Juicios Especiales de Girardot, tomó la drástica decisión de quitarse la vida el día de hoy, 17 de abril. Gaitán, conocido por su dedicación y compromiso con su labor, se lanzó desde la ventana de su propia oficina, ubicada en el sexto piso del edificio de la Fiscalía en la localidad.
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El fiscal, quien había expresado reiteradamente sus preocupaciones por la sobrecarga laboral y los altos niveles de estrés a los que se enfrentaba, dejó una nota en su escritorio que decía: «Lo siento, estoy muy atrasado de trabajo». Estas palabras, que reflejan el abrumador peso que llevaba sobre sus hombros, dejan entrever el sufrimiento silencioso que padecía.
Si bien algunos especulan sobre la posibilidad de un accidente, muchas voces en la comunidad judicial señalan la triste realidad de que este acto fue resultado de una decisión voluntaria, influenciada por las condiciones laborales extremas a las que se enfrentaba Gaitán. En una reunión previa con el equipo directivo de la entidad, había solicitado reubicación o traslado debido a la excesiva carga de trabajo que enfrentaba día a día.
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Gaitán Bazurto era reconocido como un funcionario ejemplar, con una destacada trayectoria en la Fiscalía y participación en casos de gran relevancia para la sociedad. Sin embargo, su trágico fallecimiento pone de relieve las duras condiciones laborales y el bienestar mental precario de los trabajadores del sector judicial en Colombia.
La Fiscalía General de la Nación ha iniciado una investigación exhaustiva sobre este lamentable incidente, mientras que las autoridades trabajan en la custodia del lugar del suceso para recabar evidencia que esclarezca lo ocurrido. Este trágico evento subraya la urgencia de brindar apoyo y atención a los trabajadores del sistema judicial, así como la necesidad imperante de abordar de manera efectiva los problemas de salud mental y las condiciones laborales dentro de la institución.
