En el reciente debate de Telemedellín, Rodolfo Correa, candidato a la Alcaldía de Medellín, destacó sus habilidades comunicativas, generando impacto tanto en el escenario como en redes sociales. Durante su intervención, realizó observaciones sobre la estrategia de campaña de su contrincante Federico Gutiérrez, comparándola con la dinámica de la entidad financiera «Davivienda». Correa sugirió que Gutiérrez estaba centrado en aspiraciones presidenciales en lugar de atender los problemas locales de Medellín.
De manera irónica, Correa colocó una alcancía con la emblemática casita roja de Davivienda en el atril de Gutiérrez, insinuando que el candidato debería ahorrar para su campaña presidencial.
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No obstante, el momento más destacado de su intervención surgió cuando le preguntaron sobre la conocida expresión «la tacita de plata». En respuesta, Correa afirmó: «¿Me pregunta por la tacita de plata? Se lo respondo en una frase: una ciudad huele a lo que huele su gobierno y hoy las calles de Medellín huelen a mierda. Eso lo vamos a cambiar en los primeros 45 días de nuestro gobierno». Estas declaraciones generaron reacciones agitadas entre los otros candidatos presentes y generaron un fuerte revuelo en las redes sociales.
La polémica generada por esta afirmación ha dividido las opiniones en la ciudad, dando pie a debates sobre la percepción de la situación de las calles de la capital antioqueña. Correa retó a quienes dudan de su afirmación a que se pararan en la avenida oriental y lo comprobaran por sí mismos. Sin embargo, en el debate, las candidatas Paulina Aguinaga y Liliana Rendón, manifestaron su desacuerdo con esta expresión.
A tan solo 69 días de las elecciones, Rodolfo Correa continúa impulsando su campaña, buscando consolidarse como una alternativa a las corrientes del uribismo y quinterismo. Su eslogan «No es Fico, No es Quintero. Medellín es lo Primero» se mantiene presente en su estrategia de posicionamiento.
