13 de julio del 2022

Victimización secundaria e impunidad sistemática en los caos de violencia basada en género

En los casos de violencia basada en género se presenta poca investigación, revictimización, obteniendo como resultado la impunidad y la normalización social del fenómeno de la violencia contra las mujeres.

“Las mujeres sólo tendrán igualdad de acceso a la justicia, y la violencia contra la mujer sólo será eliminada,

cuando se construya una mentalidad que las conciba como iguales y no como inferiores,

pues ésta es la causa estructural de la violencia contra las mujeres” Silvia Pimentel.

 

El sistema de opresión y dominación patriarcal continúa lesionando los derechos de las mujeres y de las personas con orientaciones sexuales e identidades de género diversas. La violencia basada en género es un problema social, de salud pública y una violación a los Derechos Humanos.

Si bien es cierto, en los últimos años producto del movimiento social de mujeres, se ha podido avanzar en el marco normativo para la atención de las violencias basadas en género, continúan los estereotipos y prejuicios en la institucionalidad, evidenciado en algunos de sus servidores y servidoras públicas, quienes no aplican la normatividad, o carecen de formación en género, incurriendo en conductas revictimizantes.

Por otro lado, no siempre se protege la dignidad y la privacidad de la víctima en el proceso, por ejemplo, la recepción de las denuncias se presenta en la mayoría de los casos, en espacios físicos y condiciones poco óptimas, rodeadas de varias personas que escuchan el relato, falta de sensibilidad ante la situación de las víctimas y la gravedad de los hechos manifestados, en especial cuándo se trata de violencia psicológica, interrumpir a las víctimas en sus declaraciones, quedando muchas veces fuera hechos victimizantes importantes, testimonios rendidos más de 5 veces ante las autoridades pertenecientes a la misma institución ,la carga de la prueba a cargo de la víctima y poca actividad de investigación por el ente encargado para la finalidad, larga duración del proceso y poco acompañamiento de las instituciones, aplicación incorrecta del principio de oportunidad, y pocas sentencias condenatorias en casos de violencia basada en género, presentando preocupante situación de impunidad y configurándose la violencia institucional.

Un enorme cuestionamiento persiste en las mujeres ¿Denunciar o no hacerlo? en el marco de la sociedad patriarcal que culpa a las mujeres por ser violentadas, dónde la sospecha recae sobre la víctima y no sobre el agresor, señalada socialmente por “no saber elegir” a la persona que la agredió, sin cuestionar a la persona que agrede o el sistema que legitima las violencias. Cuestionada por no irse, por no denunciar, pero cuándo acude al sistema ,debe descubrir el laberinto del proceso penal y esperar contar con suerte para no ser revictimizada por las autoridades, la defensa o encontrase con el agresor .

Sin embargo, abordar integralmente la violencia basada en género implica retos por parte de la sociedad y una permanente vigilancia especial y exigibilidad por parte de los sectores sociales, como lo manifestó Silvia Pimentel, una mentalidad que nos conciba como iguales, es el inicio del cambio en la concienciación frente a la problemática, y por supuesto voluntad política para poder avanzar en la construcción de una sociedad más justa que pretenda una vida libre de violencias.

<H2><a href="https://www.antioquiacritica.com/author/monica-tinjaca/" target="_self">Mónica Tinjacá Amaya</a></H2>

Mónica Tinjacá Amaya

Lidereza social, feminista. Comprometida con la transformación del país.

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