Corantioquia hace un llamado a la ciudadanía para cuidar y respetar la vida de la fauna silvestre, especialmente durante la temporada de Halloween, cuando ciertos animales son objeto de estigmas y creencias erróneas. Entre estas especies se encuentran murciélagos, lechuzas, ratones y búhos, que suelen ser asociados con mitos que los convierten en víctimas de maltrato.
Durante esta época, se intensifican los relatos de terror que relacionan a estos animales con peligros y supersticiones. Creencias como que los murciélagos solo se alimentan de sangre o que los búhos son portadores de mala suerte han perpetuado su mala fama. Sin embargo, Corantioquia recuerda la importancia de estas especies en el equilibrio ecosistémico.
Antioquia alberga una gran diversidad de fauna silvestre. A pesar de ser el segundo país con mayor variedad de murciélagos en el mundo, solo un pequeño porcentaje de ellos se alimenta de sangre. La mayoría consume insectos, frutas y néctar, contribuyendo así a la salud de los ecosistemas.
Las lechuzas y búhos, a menudo vinculados con mitos de brujas, desempeñan un papel crucial en el control de plagas. Asimismo, los sapos y ranas son indicadores de un ambiente saludable, y su desaparición puede ser alarmante.
Corantioquia subraya que las serpientes, a menudo vistas como amenazantes, son esenciales para mantener el equilibrio ecológico al controlar poblaciones de roedores y otras especies. Los ratones, por su parte, ayudan en la dispersión de semillas y la mejora del suelo.
La entidad invita a la comunidad a reflexionar sobre la importancia de estas especies y a protegerlas en lugar de estigmatizarlas, promoviendo así una convivencia armónica con la fauna silvestre.