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15 de noviembre del 2024

¿La realidad moldea la música o la música moldea la realidad? Medellín el atractivo turístico para pedófilos extranjeros

Es nuestro cuerpo el primer medio que tenemos para reconocernos como individual autónomos que comparten su espacio con otros cuerpos.

La maleta de equipaje que guarda toda la composición humana: materia-espíritu; mente-cuerpo; razón-acción. Pero más allá de esta unión de pedacitos que hacen nuestra composición, también nos convierte en cuerpos vulnerables, frágiles y sensibles a el mundo que nos rodea. Esa violencia que se llega a ejercer a otros aparece mucho más terrible y preocupante cuando se dirige a cuerpos en incapacidad biológica, emocional y psicológica para comprender o tan siquiera poder llegar a defenderse: las infancias.

Medellín está atravesando una situación extremadamente alarmarte con la escandalosa cantidad de casos expuestos en los últimos meses de turismo sexual, explotación sexual infantil y comercio de abuso sexual infantil. Pero a parte de esa preocupante situación hace unos días salió la muy anunciada y esperada canción realizada con la colaboración de varios exponentes del reggaetón antioqueño y nacional. A sorpresa de muchos esa canción reproducida en un formato musical y mediático tiene como referencia de una menor de 14 años con un cuerpo voluptuoso, consumidora de drogas, con una vida nocturna activa con excesos, en otras palabras: la sexualización temprana de una adolescente paisa. ¿Es entonces está canción un reflejo comercial de la situación que atraviesa la ciudad, o es en cambio la música la moldeadora de estos “cánones” que se normalizan y utilizan para dar forma a una cultura?

Podríamos argumentar que existe una complicidad entre esas dos posturas, tal vez se complementan mutuamente porque: por un lado, la búsqueda de la apertura turística en la región estuvo oculta por el contexto del Conflicto Armado en Colombia, el narcotráfico fuertemente popularizado por el criminal Pablo Escobar y el Cartel de Medellín, como también por la condición de pobreza, violencia y desigualdad social y todo lo que esta tiene como consecuencia. Por el otro lado tenemos un género música caracterizado desde sus orígenes por las letras explícitas alusivas a sexualidad y la libre acción de esta, enmarcada en un contexto latino de música bailable, popular y exótica por su misma condición de latinoamericana. Y al final, al convertirse las dos anteriores menciones en características mediáticas y mal publicitadas, creó en el ilusorio extranjero, principalmente al ciudadano europeo y estadounidense, la creencia de Medellín como el típico caldo de cultivo tercermundista de violencia y caos que tanto les gusta vender, tal vez para seguir sintiéndose por encima de nosotros o justificar la violencia producida por sus gobiernos desde hace tanto tiempo atrás.

Y ahora se presenta ante nuestros ojos un crimen de secreto a voces que nos recuerda nuevamente que nuestra región se convierte en el patio de recreo de los ciudadanos extranjeros del mal llamado, inventado y acomedido título de “primer mundo”  que buscan venir a hacer acá lo que saben que les sería más difícil hacer en sus países, esto demuestra la existencia de la conciencia de su acto criminal con fines de aprovechándose de la vulnerabilidad de la infancia en situación de pobreza y negligencia estatal.

Y con toda la opulencia y falta de relacionamiento con la realidad, llegan estos artistas paisas a musicalizar el reflejo de su ciudad que parece que poco o nada la conocen. Los cantantes no son individuos ajenos a la realidad por su condición de fama, no están por encima y exentos de los principios éticos innegociables que necesita una sociedad que debe garantizar a las niñas, niños y adolescentes un desarrollo sano y libre de violencia.

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<H2><a href="https://www.antioquiacritica.com/author/daniel-largo/" target="_self">Daniel Largo</a></H2>

Daniel Largo

Soy un sociólogo apasionado por la comprensión de las sociedades modernas; mi enfoque es humanista, y este se ve reflejado en mi compromiso con los derechos humanos. Analizo hechos sociales, especialmente en el ámbito político y electoral.

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