Últimamente con la cuarentena y el aislamiento preventivo desperté un interés por conocer las movidas del Congreso, los proyectos, los debates y los congresistas que los defienden. Con mucho tiempo libre por delante, es apenas normal que surja el interés por aquellas personas que prácticamente definen el futuro del país donde vivo, ¿no?.
Tras largas jornadas revisando los perfiles de los congresistas con lista en mano, leyendo acerca de proyectos de ley y los que se estaban discutiendo y también sintonizando de vez en cuando el canal del Congreso, empecé a entender de forma profunda como son las cartas políticas en esta institución.
Me empezó a llamar mucho la atención las propuestas de Julián Peinado, candidato al que reconozco no le di mi voto, en ese entonces voté por Daniel Duque, ahora concejal de Medellín. Vi en Julián una persona que representaba todo lo que yo buscaba en un político. Defiende las causas en las que creo y es tenaz en sus intervenciones.
Vi a Julián presentar proyectos para que instituciones educativas superiores revivan el 5% de las regalías, lo vi apoyar el proyecto que prohibía las pruebas cosméticas en animales y lo vi presentar debates acalorados acerca del fracking, el glifosato, los niños y los animales. Me gustó la vehemencia con la que expone y lo comprometido que está con las luchas que libra.
El pasado 22 de julio fue nombrado Vicepresidente de la Comisión Primera de la Cámara de representantes al presentarse por el Partido Liberal, esto es algo importante para mencionar, Julián Peinado es un representante liberal y esto se ve plasmado en sus ideas y la forma en que las defiende.
Por otro lado, y no contento con hacer una excelente labor en el Congreso, también hace parte de otras iniciativas, hace unos días contó que ahora hace parte del Frente Parlamentario Contra el Hambre en Colombia, estrategia que busca reducir y compartir el hambre, la malnutrición, la inseguridad alimentaria y el cambio climático en el mundo.
En definitiva, Julián Peinado es un congresista juicioso con los debates y la asistencia a las sesiones, en todas las que he sintonizado jamás lo he visto ausente o distraído, también está muy comprometido con la transparencia y por eso cada tanto brinda un reporte de cuentas en sus redes sociales, hace videos explicando cada jugada política y eso es asumir una tarea con toda la responsabilidad.
No sé qué podría seguir para Julián Peinado después de que termine su periodo constitucional en el 2022. ¿Me encantaría verlo? Por supuesto que sí y aunque la política es decepcionante para nosotros los jóvenes, es bacano ver gente jóven haciendo cosas buenas y sobre todo, haciendo quedar bien a los antioqueños.