La Alcaldía a través de la Dirección de Desarrollo Social, invita a toda la comunidad para que participen del concurso de fotografía en Campamento.
La iniciativa incluye a todas las familias del municipio, en el marco de la celebración de: “Nuestra identidad Antioqueña”.
La fotografía
La fotografía es un producto cultural. Viene de una cultura y alimenta otra. La lectura fotográfica es una oportunidad inigualable de entender quiénes somos, sin importar si somos fotógrafos u observadores y quién es el otro.
Por medio de esta invitación promueve diferentes concursos, entre los que se encuentra el Concurso de Fotografía de la Familia más Antioqueña.
El cual consiste en que los participantes tomen una foto de su familia, en su cotidianidad y representando lo que para ellos, los hace muy antioqueños.
Estas fotografías serán publicadas en las principales redes sociales de la alcaldía municipal y podrán ganar diversos premios.
Concurso de fotografía en Campamento
Símbolos
No olvidemos que la fotografía, comprendida en términos semióticos, tiene este importante componente simbólico. Es decir, la imagen también es un lenguaje que puede ser leída desde los símbolos, y éstos son acuerdos culturales.
La fotografía es un mensaje por lo tanto, una fotografía puede hablar de la forma de vida y los valores culturales de un familia entera, en muchos casos, incluso, termina diciendo mucho más un retrato familiar que una larga historia escrita.
Identidad
A través de la fotografía es posible representar diferentes identidades, decir mucho sin tener que decir tanto. Por medio del retrato y sus elementos, se generan signos que parten de la realidad.
La imagen fotográfica cuenta con un poder de credibilidad y gracias a este poder es posible materializar algunas realidades del creador a través de experimentar con los elementos de la imagen como la expresión facial, el lenguaje corporal y el contexto.
Identidad cultural
Este concurso reafirma no solo el poder que tiene la fotografía como medio y agencia de la producción y reproducción de identidades culturales sino también como forma de interacción de la comunidad.
Alrededor de un reto o un concurso que da valor a la cotidianidad y las formas de vida tradicionales del municipio y que además, fortalece el tejido social participativo en tiempos complejos como estos.