La Secretaría de Salud del municipio de Frontino está comprometido con la pedagogía y el fortalecimiento de los hábitos alimenticios saludables de la comunidad, por lo que han iniciado una campaña a través de la cual se brindan tips y consejos útiles de alimentación saludable para las familias.
Es importante resaltar que la sana alimentación de los niños y niñas, es fundamental para el desempeño óptimo de sus actividades. Además, su salud depende en gran medida de sus padres y de su familia, por eso, son estos quienes tienen que enseñar hábitos de alimentación sana y brindarles lo mejor desde casa.
Así, el mensaje que la secretaría de salud quiso entregar a las familias, tiene que ver con la importancia de implementar hábitos sanos en el día a día. Al momento de educar a un niño, uno de los principales retos es lograr que coma saludablemente sin que esto se convierta en una batalla de negociación tipo premio o castigo. Para lograrlo, es necesario que en la familia tome ciertas medidas, por ejemplo, que aplique el “mindful eating”, un término que se refiere al comer consciente disminuyendo las distracciones, apagando los televisores y guardando los dispositivos móviles en el momento de sentarse a comer, estas medidas, ayudan a que los niños y niñas sean más conscientes de lo que está sobre la mesa, también los ayudará a masticar mejor y a disfrutar de los espacios con su familia.
Es importante resaltar que la sana alimentación de los niños y niñas, es fundamental para el desempeño óptimo de sus actividades.
Por otra parte también se aconseja a las familias que sean los niños y niñas quienes escojan cuánto comer, pero que sean ellos quienes decidan qué comer, ya que por lo general, los niños dejan de comer cuando se sienten satisfechos y es importante que aprendan a escuchar su cuerpo sin ser obligados a comer de más. Además, la comida no puede ser asumida como un premio o un castigo, por lo tanto ese dicho tan común de algunos padres de “hasta que no acabes no puedes pararte de la mesa” o “si te comes las verduras te daré doble postre”, lejos de estar fomentando hábitos alimenticios sanos, puede contribuir a que se tenga un rechazo a los alimentos que los hacen pasar por retos o malos momentos.
Finalmente, sabemos que comer de forma balanceada es todo un reto, pero si los niños y niñas aprenden a hacerlo desde que son pequeños, cuando crezcan, tendrán buenos hábitos y comer saludable será parte de su cotidianidad.